jueves, 27 de enero de 2011

Lo reconozco. Yo también he caído.




Sí, sisisisisisisí, yo también andaba protestando cosas como "esto de los libros digitales es una caca, rompe todo el romanticisimo de un buen libro, con su tacto especial, su suspense al pasar la página (esto me pasa mucho con Stephen King, que tengo que decirme mentalmente muchas veces "no pasa nada, sólo es un libro, sólo es un libro"), sus manchas de nocilla de cuando merendabas a la vez, las notitas al pie, las dedicatorias..."

Ajá, es cierto, lo sigo pensando. Donde esté un libro de verdad déjate de tonterias de libros digitales.

Lo que también es cierto que cuando te vas de viaje nunca sabes cuántos libros meter en la maleta. Uno es poco. Llevar más hace que pese mucho. Cargar por todo un país con un libro gordo (para que te dure más) en el bolso es un rompehombros. Todo eso es cierto o por lo menos a mi me pasa.

Y llegó la fecha de reyes. Esa en la que tus padres te preguntan qué quieres este año. Normalmente tengo una lista bastante larga pensada, pero resulta que el año pasado (por fin) me hicieron un contrato un poco estable, lo cual reporta los medios suficientes a mis bolsillos para que si se me antoja algo, comprármelo. O sea, no tenía ni idea de qué pedir.

Había hablado con varias personas que me dijeron que los libros electrónicos van bastante bien, que sí que puedes subrayar cosas, que puedes escribir, que tal y que cual. También Lady Boheme, opinante del gremio, lo cual se valora doble, tiene bastante cariño al suyo. Así que me lo planteé, ¿por qué no? En Burgos todavía no he visto a nadie usándolo, pero aquí en Madrid en el Metro ya lo tiene un montón de gente. No hay que negar su comodidad...

Total, que me decidí. El problema después era escoger uno. Hay un montón en el mercado. Yo no lo quería muy caro, porque su uso va a ser esporádico y porque me da lo mismo que lleve incorporado un sistema de teledetección GPS, frenos ABS y reconocimiento de retina. Yo quiero leer libros. Ni más ni menos.

Después de mirar en varios establecimientos comerciales grandes, todo me pareció exageradamente caro. Así que volví a recurrir a mi comodín. Amazon. Pero claro, entre tanto pensar y comprobar, se me echó el tiempo encima y para cuando lo solicité estaban hasta arriba con los pedidos navideños.

Total, que mi Kindle llegó hace un par de semanas (más tarde de reyes, oohhh) a casa (Burgos) y yo no lo he cogido hasta este fin de semana.

No me digáis que no es mono, con la funda molona que me he cogido en rojo pasión, muy práctica porque a la vez le protege y sirve de atrilillo, o sea, que se sostiene solo.

Estoy en periodo de conocimiento. De momento me voy a leer el Libro de la Selva en versión original (no es que sea así de guay porque sí, es que por si no lo sabéis hay libros que se consideran de dominio público y su descarga es gratuita. Son todos aquellos que ya se consideran literatura clásica y no están sujetos a derechos de autor. En inglés es bastante fácil encontrarlos, por ejemplo en http://www.gutenberg.org o en http://manybooks.net/. Supuestamente también deberían estar en español, pero lo que yo he encontrado es más residual, no es tan fácil encontrar cómo bajártelos y menos en versión para un reader). O sea, como me lo tenía que releer (esto es lo que me pasa por estar en lobatos) pues The Jungle Book y The Second Jungle Book (en español se llama Libro de las Tierras Vírgenes), serán mis primeras lecturas digitales. Y en V.O. que así pillo todos los matices.

A ver qué tal superamos la primera fase de contacto. Yo creo que de primeras nos gustamos bastante :P

4 comentarios:

  1. Me ha hecho gracia ver mi nombre ahí "como opinante del gremio", jeje.

    Pues sí, son una inversión MUY buena. A ver, que todos queremos notar el papel en las manos, pero como acumules en tu casa todo lo que leas, mal vamos. En mi caso, leo en el e-reader cosas que podría prestarme alguien pero que tiene un tamaño excesivo para pasearlo por el metro; libros exentos de derechos (recordemos que si han pasado más de 50 años desde la muerte del autor, la obra se considera de dominio público y las editoriales deberían cobrar únicamente por el gasto que conlleva hacer ese libro... y cuestan lo mismo o más que libros actuales ¬¬ ), cosas raras que están descatalogadísimas, o cosas que no me compraría, pero me apetece leer.

    Yo descargo (ilegalmente, sí, y qué? Me han estado cobrando de más y lo siguen haciendo porque sigo comprando libros, así que, una cosa por otra) en una web que se llama Bibliotheka. Está muy bien, lo malo es que suben las cosas en doc y pdf. No sé qué tal hace el zoom tu maravilloso kindle (qué envidia me das :P) pero mi iliad no es muy bueno para eso. Con los doc lo que hago es eliminar los márgenes, aumentar la letra a tamaño 28 e imprimir a pdf. Así se ve estupendamente.

    También hay un programa, Calibre, para retocar archivos para e-readers... pero no termino de aclararme con él (es gratuito).

    Por cierto... qué rabia me da cuando alguna vez se me mancha un libro, lo detesto!!!!

    Yo le veo muchas ventajas al e-reader (ya lo sabéis, jeje), pero siempre combinado con libros en papel. El problema es la industria editorial, que parece no darse cuenta de que la gente no se va a dejar timar igual con los libros digitales que con el papel (lo siento, pero en España nos roban, estos precios no son normales, que una novela cueste 30 euros, que es lo que costaban antes los libracos de arte, es un robo en toda regla), y lo único que nos queda es recurrir al pirateo. Y luego la culpa será nuestra.

    Además, que con todas las trabas que ponen para adquirirlos legalmente, al final es más fácil descargarlo de cualquier parte.

    Por cierto, que en ninguna página española he visto que regalen los clásicos, como deberían hacer. No son listos ni nah. En bookdepository sí puedes descargar obras clásicas de manera gratuita.

    Mi e-reader me venía precargado con 50 clásicos en inglés, el tuyo no???


    Bueno, no me enrollo más, que este tema da para mucho. Me alegro de que "hayas caído", como quien dice, y que estés contenta con él. Es cuestión de ir cambiando... pero desde luego hay ocasiones en que merece la pena (estoy pensando en cuando me lea La Caída de los Gigantes, que me lo podrían prestar, peeeeero...).

    Besines!!

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  2. Jajaja, muchas gracias por tu testamento, me ha encantado.
    No maja, mi libro es más baratito pero venía vacío, claro que como tienen libros gratis para descargarte pues supongo que viene a ser lo mismo.
    Me apunto la idea del pdf y de la página piratilla. De momento creo que tengo suficiente papel pendiente como para no empezar a sacarle mucho partido, pero poco a poco, poco a poco... jia jia jia...

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  3. Jeje, yo soy algo reacia a los aparatos esos aunque es cierto que, a la hora de viajar, a veces, un libro es poco... La pena es que, para los que no entendemos en inglés los matices ni lo que no son matices, no hay demasiados libros o en su defecto... son caros!! Porque vía fnac a veces curioseo y 10 euros ( o mas ) por libro me parece demasiado!

    Un besiño

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