EL HOMBRE DEL TRAJE COLOR CASTAÑO. AGATHA CHRISTIE
Después de un libro de temática tan dura como el anterior, yo personalmente, me desquito con lectura ligera a la par de satisfactoria, que siempre me deja con buen sabor de boca.
Para eso Agatha Christie es un valor seguro y siempre tengo en la recámara unos cuantos libros suyos sin leer, dispuestos para cuando son necesarios. Como ahora.
El hombre del traje color castaño está protagonizado por Anne Beddingfield, hija de un eminénteme paleontólogo-peñazo (doy fe de que existen a montones), que hasta el momento de la muerte de su padre ha vivido una vida anodina en un pueblo anodino y que se encuentra sola y sin demasiado dinero en su bolsillo.
Aprovecha la primera oportunidad que se la presenta y a riesgo de parecer un poco ladilla, aprovecha un ofrecimiento que le hace un amigo de su padre y va unos días a Londres en busca de aventuras y de un nuevo futuro.
Como no podría ser de otra manera, las aventuras salen a su paso y es testigo de cómo un hombre cae a la vía del tren tras asustarse por algo que ha visto a la espalda de ella. Este hecho es el inicio de una compleja trama que la lleva hasta la Sudáfrica profunda, pasando por un ajetreado viaje en barco, donde conoce a su galán, que nadie sabe si es bueno o malo y que ella está dispuesta a defender contra toda opinión.
Lo típico, enredos, confusiones, pistas que no llevan a ninguna parte, personajes que actúan de manera confusa... pero tan bien escrito como siempre.
Y con una solución tan satisfactoria como siempre.
Gracias Ágatha por estar cuando se te necesita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario